Es un sangrado en el cerebro causado por la ruptura de un vaso intracraneal. Ver también accidente cerebrovascular hemorrágico.
Causas, incidencia y factores de riesgo
El sangrado interno se puede presentar en cualquier lugar del cerebro y la sangre se puede acumular en los tejidos o en el espacio que existe entre el cerebro y las membranas que lo cubren. El sangrado puede estar aislado en parte de un hemisferio cerebral (hemorragia intracerebral lobular) o tener lugar en otras estructuras cerebrales, como el tálamo, los ganglios basales, el puente o el cerebelo (hemorragia intracerebral profunda).
La hemorragia intracerebral puede ser ocasionada por lesión cerebral traumática o anomalías en los vasos sanguíneos (aneurisma o angioma). Cuando no se produce por una de estas afecciones, se asocia comúnmente con la presión sanguínea alta (hemorragia intracerebral hipertensiva). En algunos casos no se encuentra ninguna causa.
La sangre irrita los tejidos cerebrales, ocasionando hinchazón (edema cerebral) y se puede acumular en forma de una masa denominada hematoma. Tanto el edema cerebral como el hematoma que se encuentran en el interior del cerebro aumentan la presión sobre los tejidos cerebrales y los pueden destruir rápidamente.
Los síntomas varían según la localización del sangrado y la cantidad de tejido cerebral afectado. Por lo regular aparecen súbitamente, sin previo aviso y con frecuencia cuando la persona está en actividad. Estos síntomas pueden aparecer ocasionalmente de una manera escalonada, episódica o pueden empeorar de manera progresiva.
Otros factores que aumentan el riesgo de hemorragia intracerebral incluyen los siguientes:
- Trastornos hemorrágicos y de la sangre
- coagulación intravascular diseminada
- hemofilia
- anemia drepanocítica
- leucemia
- niveles reducidos de plaquetas en la sangre
- Consumo de aspirina o medicamentos anticoagulantes (diluyentes sanguíneos)
- Enfermedad hepática (que en general se relaciona con un aumento del riesgo de sangrado)
- Amiloide cerebral o tumores cerebrales
Los bebés prematuros (nacidos antes de las 35 semanas de gestación) algunas veces experimentarán sangrado en los ventrículos (espacios llenos de líquido) que están en el interior del cerebro. Este tipo de sangrado se denomina hemorragia intraventricular y sucede el primer día o algo así de vida y usualmente no es previsible. El resultado es variable, dependiendo de la gravedad del sangrado y oscila entre ningún daño aparente hasta incapacidad severa. El diagnóstico se hace por medio de ecografía y se efectúa normalmente en una sala de cuidados intensivos para niños.
Síntomas
- Dolor de cabeza
- puede suceder cuando la persona está acostada
- puede despertar a la persona
- puede aumentar con el cambio de posición
- puede aumentar cuando el paciente se inclina, se tensiona y cuando tose
- Náuseas, vómitos
- Cambio en el estado de alerta (nivel de conciencia)
- indiferente, introvertido
- somnoliento, letárgico, adormilado, estuporoso
- inconsciente, comatoso
- Cambios en la visión
- cualquier cambio en la visión
- disminución de la visión, pérdida total o parcial de la visión
- pupilas de diferente tamaño
- movimientos incontrolables de los ojos
- párpado caído
- Cambios en las sensibilidad
- Dificultad para hablar o entender el lenguaje
- Dificultad al deglutir
- Dificultad al escribir o leer
- Cambios en los movimientos
- debilidad en cualquier parte del cuerpo
- dificultad para mover cualquier parte del cuerpo
- pérdida de habilidades motoras finas
- temblor en las manos
- Pérdida de coordinación
- Pérdida del equilibrio
- Convulsiones
- Sentido del gusto anormal
Signos y exámenes
El examen neurológico puede indicar aumento de la presión intracraneal o disminución de las funciones cerebrales. Los síntomas específicos de la persona pueden ayudar a determinar cuál es la parte del cerebro afectada.
Un examen de los ojos puede mostrar hinchazón del nervio óptico, debido al aumento de la presión en el cerebro. Puede haber cambios en el movimiento del ojo, reflejos anormales, disminución de la visión, pérdida del movimiento o coordinación o incapacidad para percibir las sensaciones apropiadamente.
Los exámenes pueden abarcar los siguientes:
- CSC
- Conteo de plaquetas
- Tiempo de sangrado
- Tiempo de protrombina (PT) o tiempo parcial de tromboplastina (TPT)
- Pruebas de la función hepática
- Pruebas de la función renal
- TC de la cabeza
- IRM de la cabeza o MRA
- Angiografía cerebral convencional o angiografía de la cabeza con TC en espiral para buscar un aneurisma o una malformación arteriovenosa.
Tratamiento
Una hemorragia intracerebral es una afección grave que requiere atención médica inmediata, ya que puede convertirse rápidamente en una situación potencialmente mortal.
El tratamiento depende de la ubicación, la magnitud y la causa de la hemorragia.
Es posible que se necesite la cirugía, especialmente si hay un sangrado en el cerebelo. La cirugía también se lleva a cabo para reparar o extirpar estructuras que causan el sangrado (tales como un aneurisma cerebral o una malformación arteriovenosa).
Entre los medicamentos que se utilizan se pueden mencionar los analgésicos, los corticosteroides o los diuréticos para disminuir la hinchazón y los anticonvulsivos para controlar las convulsiones. Es posible que se necesite sangre, hemoderivados y líquidos intravenosos para compensar la pérdida de sangre y de líquidos. Igualmente, se pueden recomendar otros tratamientos, dependiendo del estado de la persona y de los síntomas que presenta.
Pronóstico
La evolución del paciente depende del tamaño del hematoma y de la cantidad de inflamación.
La recuperación puede ocurrir completamente o puede haber algo de pérdida permanente de la función cerebral. Es posible que se presente la muerte y puede ocurrir rápidamente a pesar del tratamiento médico oportuno.
Los medicamentos, la cirugía u otros tratamientos pueden producir efectos secundarios graves.
Complicaciones
- Accidente cerebrovascular hemorrágico
- Pérdida permanente de cualquier función cerebral
- Efectos secundarios por el uso de medicamentos para tratar la enfermedad
Situaciones que requieren asistencia médica
Si los síntomas indican una hemorragia intracerebral, la persona debe ir a la sala de emergencias o llamar al número de emergencia local (061), ya que esta condición es potencialmente mortal.
Los síntomas de emergencia son, entre otros:
- Insuficiencia respiratoria
- Convulsiones
- Pérdida del conocimiento
- Incapacidad para hablar o deglutir
- Parálisis de un brazo, de una pierna o de la mitad del cuerpo
Prevención
El tratamiento y control de los trastornos subyacentes pueden reducir el riesgo de sufrir hemorragia intracerebral. Se debe tratar la presión sanguínea alta y no se debe suspender el consumo de medicamentos, a menos que sea recomendado por el médico.
Las afecciones, tales como un aneurisma, se pueden tratar a menudo antes de que puedan provocar sangrado en el cerebro.
REFERENCIAS
MEDLINE. Enciclopedia Médica. http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/encyclopedia.html 2008